Las mejores frases contra la violencia verbal
A través de la violencia verbal vemos la autoestima de cada ser, frágil y rota.
Ya sea que su diálogo no sea violento u ofensivo, deje buenos rastros en su conversación.
No repitas el patrón de cómo te trataron, rompe esa cadena y libera a todos de ese vil abuso.
Cuanto más hieres con tus palabras e insultos, más te vilipendias como ser humano en este mundo.
Cuando los insultos y las groserías acompañan tus palabras, lo que pasa es el malestar y el mal rato.
Insultos, gritos y comentarios sarcásticos, así te diriges a mí, motivo suficiente para decirte que no podemos hablar así porque hay que provocar violencia verbal.
Frases contra la violencia verbal
Cada vez que gritas para hablar conmigo aumenta tu nivel de violencia verbal, esa forma de tratarme solo me hace repeler.
Cuando usas violencia verbal, mi autoestima se daña y continuar con tu amistad es un riesgo que no quiero correr.
Esos pequeños comentarios que haces cuando estamos solos me causan daño psicológico, tu ofensa trata de inquietar y es algo que ya no estoy dispuesto a soportar.
Cuando ejerce violencia verbal contra un miembro de la familia, todos en esa familia sufren las consecuencias de su locura.
La culpa, el insulto, la crítica, la amenaza y toda protesta provocan violencia verbal destinada a causar daño.
Tus palabras y gestos causan dolor y miedo, detente un momento y muestra tu lado bueno.
A través de tu violencia verbal, causas un daño terrible, cuando lo haces te conviertes en un ser aterrador que nadie querría ver.
Mientras haces daño con la violencia verbal, haces que la persona se sienta desvalorizada, minimizada, anulada, y no estamos dispuestos a aguantar que quieras hacer más daño.
Estoy llena de fuerza y autoestima, porque la violencia verbal, física, psicológica es lo que no quiero sufrir.
A través de tu abuso verbal solo logras lastimar y ahí es cuando la gente se aleja más de ti.
Cuando le gritas a una mujer, lastimas su naturaleza de ser, su alma se lastimará y su corazón se entristecerá.
Si eres educado, los gritos y los insultos permanecerán.
La mujer es un ser muy completo, aunque reciba gritos e insultos, su corazón siempre es fuerte para superar todo.
Ternura y delicadeza. Son los elementos necesarios para tratar con cualquier persona, no es necesaria la violencia verbal.
Cuando usas la violencia verbal, todo lo que te rodea se vuelve incómodo.
Que tus relaciones con las personas sean maravillosas, no una pesadilla por tus palabras indignas.
Haz que tus palabras tengan amor, sabiduría, para que cuando hables de respeto lo demuestres todos los días.
Cuando hablas con serenidad y te diriges con respeto, serás una persona que se ganará el cariño y la admiración de quienes te saben escuchar.
En cada abuso verbal que ofreces a tus compañeros, aumentas la violencia en la sociedad.
Por favor, sé ejemplar en palabras, pensamientos y acciones, no el abusador que la sociedad rechaza por la forma en que se expone.
Cada vez que provocas violencia verbal a tus amigos, lo que se registra son las lesiones. No sé cómo pudiste eliminarlos y recuperar quiénes eran tus amigos.
Si intentan gritarte, insultarte, agredirte verbalmente, ante la violencia verbal estás presente, marca un límite que es necesario para que no se repita.
Si lo que dices son gritos e insultos, eres verbalmente abusivo y las personas que te rodean comenzarán a odiarte.
Cuando al hablar salen gritos e insultos de tu boca, eres verbalmente abusivo y alejarte de ti sería lo ideal.
Cuando experimentas abuso verbal, incluso si crees que es normal, detenerlo es lo ideal.
Respeto. Es lo que debes exigir ante la presencia de un grito que debe surgir.
Si notas violencia verbal, hazte escuchar de inmediato, no lo permitas la primera vez porque después sufrirás.
¡Para detener! Basta ya de violencia verbal, tu agresión me golpea la razón.
Si es la primera vez que te agreden verbalmente, hazles saber que estás hecho para protegerte.
Todos hemos cometido el error de gritarle a alguien en algún momento, pero si es repetitivo, será motivo para denunciarlo para que su maltrato merezca su castigo.
Por favor, no me maltrates verbalmente, tengo derecho a que me traten con amabilidad.
